viernes, 29 de noviembre de 2013

Un unico y gran SINDICATO global para resistir al IMPERIO Mercado global destructor del VIDA

Intermezzo Pag. 195 del libro IMPERIO   de Michael Hardt y Antonio Negri

Durante su  peregrinaje por la tierra, esta ciudad celestial convoca a todas las gentes y asi reune a una sociedad de extranjeros que hablan todas las lenguas.
San Agustin


Queremos destruir todos los ridiculos monumentos  <<a todos aquellos que murieron por la patria>>  que desde su altura nos miran  en cada pequeña ciudad y queremos erigir en su lugar  monumentos a los desertores. Los monumentos a los desertores representaran también a aquellos que murieron en la guerra,  porque cada uno de ellos murió maldiciendo la guerra y envidiando la felicidad del desertor . La Resistencia nace de la deserción.
PARTISANO ANTIFACISTA,
Venecia, 1943

Hemos llegado pues a un punto de inflexión de nuestra argumentación. La trayectoria que trazamos hasta aqui –desde la modernidad entendida como crisis hasta nuestros analisis de las primeras articulaciones de la nueva forma imperial de la soberanía—nos permitió comprender las transformaciones experimentadas en la constitución del orden mundial.
Pero ese orden no seria mas que una cascara vacía si no nos refiriéramos ademas a un Nuevo régimen de  producción. Por lo demás aun no hemos podido dar ninguna indicación coherente del tipo de subjetividades políticas que podrían oponerse a las fuerzas del imperio y derrocarlas, porque tales subjetividades solo pueden surgir en el terreno de la producción. Es como si, llegados a este punto, solo pudiéramos ver sombras de las figures que habrán de animar nuestro futuro. Descendamos pues a las ocultas profundidades de la producción par a ver las figures que operan allí.
Aun cuando lográramos abordar la dimensión productiva y ontológica de la problemática y las resistencias que surgen en ella, todavía no estaríamos en posición  --ni siquiera al final de este libro—de indicar ninguna elaboración existente y concreta de una alternativa política al imperio. Un anteproyecto efectivo de esta índole nunca podrá emerger de una articulación teórica como la que presentamos nosotros. Solo puede surgir de la practica. En cierto momento de su razonamiento, Marx necesito que existiera la comuna de París para poder dar el salto y concebir el comunismo en términos concretos como una alternativa efectiva a la sociedad capitalista. Hoy, para dar ese próximo paso concreto y crear un nuevo cuerpo social que este mas allá del imperio, ciertamente serian necesario algunos de tales experimentos o series de experimentos realizados en virtud del genio de la practica colectiva.

UN UNICO GRAN SINDICATO:
Nuestro estudio partió de la hipótesis de que el poder del imperio y los mecanismos de la soberanía imperial solo pueden entenderse cuando se los sitúa en la escala mas general, en su globalidad. Creemos que para alcanzar el objetivo de oponerse y resistir  al imperio y a su mercado mundial, cualquier alternativa que se proponga debe situarse en un nivel igualmente global. Cualquier propuesta de una comunidad particular aislada, definida en terminus raciales, religiosos o regionales, <<devinculada>> del imperio, protegida de las fuerzas que este le impone por fronteras firmes, esta condenada a convertir en tal comunidad en una especie de gueto. No es posible oponer Resistencia al imperio a través de un proyecto que apunte a lograr una autonomía limitada, local. Ya no es posible retornar a una forma social anterior, ni tampoco avanzar aisladamente. Antes bien debemos atravesar el imperio y salir del otro lado. Deleuze y Guatatari sostenían que, en lugar de resistirnos a la nacionalización del capital, debíamos acelerar el proceso. <<Pero se preguntaban—Cual es el camino revolucionario? Existe alguno? Abandonar el mercado mundial? O podría ser ir en la dirección opuesta? Ir aun mas lejos, esto es, siguiendo el movimiento del mercado de decodificacion y desterritorializacion? >>1 Para combatir contra el imperio, hay que hacerlo en su propio nivel de generalidad e impulsando los procesos que ofrece mas alla de sus limitaciones actuales,. Debemos aceptar ese desafío y aprender a pensar y a obrar globalmente. La globalizacion debe enfrentarse con una contraglobalizacion, el imperio con un contraimperio.
En este sentido podríamos inspirarnos en la visión ofrecida por San Agustin de un proyecto destinado a oponerse al decadente Imperio romano. Ninguna comunidad limitada podía tener exito y ofrecer una alternativa al dominio imperial, solo una comunidad católica, universal que reuniera a todas las poblaciones y todas las lenguas en un transito común podía lograrlo. La ciudad divina es una ciudad universal de extranjeros, que se reunen, cooperan y se comunican entre si. Sin embargo nuestro peregrinaje por la tierra, a diferencia del de san Agustin, no conduce a un telos trascendente, es y continua siendo absolutamente inmanente. Su movimiento continuo, que reune a los extranjeros en una comunidad, que hace de este mundo su hogar, es a la vez el medio y el fin o, mas precisamente, un medio sin un fin.
En esta perspectiva los trabajadores industrial del mundo (Industrial workers of the world, iww) es el gran proyecto agustiniano de los tiempos modernos. En las primeras décadas del siglo XX, los Wobblies, como se los llamaba entonces, organizaron enérgicas huelgas rebeliones por todo el territorio de los Estados Unidos, desde Laurence, Masachusetts, Paterson y Nueva Jersey, hasta Everett y Washintong. El movimiento perpetuo de los Wobblies fue en verdad un peregrinaje inmanente que creo una nueva sociedad en la valva de la antigua, sin establecer estructuras de dominios fijas ni estables. (En realidad, la principal critica que hacia entonces y continua haciendo ahora la izquierda oficial a las practicas de los IWW es que sus huelgas,  y aunque enérgicas y a menudo victoriosas, nunca produjeron estructuras de union duraderas). Los wobblies lograron un éxito extraordinario entre los integrantes de las vastas y móviles poblaciones de inmigrantes porque hablaban todas las lenguas de esa fuerza laboral hibrida. Las dos versiones aceptadas sobre el origen de la denominación <<wobbly>> ilustran estas dos caracteristicas  centrales del movimiento, su movilidad organizativa y su hibridacion etnico-linguistica: la primera versión supone que el nombre  <<wibbly> (<<vacilante, incierto>>) se refiere a la falta de centro, al peregrinaje flexible e impredecible de los militants  de IWW; la segunda sostiene que el nombre deriva de la pronunciación defectuosa de un cocinero chino de Seattle, << I wobbly wobbly>>.  El foco principal del IWW era la universalidad de su proyecto. Los obreros de todas las lenguas y todas las razas del mundo (aunque en realidad llegaron solo hasta Mexico) y los trabajadores de todos los oficios debieran reunirse en un <<único gran sindicato>>.

Siguiendo el ejemplo de los IWW y apartándonos claramente; en este sentido, de San Agustin, ubicaríamos nuestra visión política en la misma linea de la tradición republicana radical de la democracia moderna. Que significa hoy ser republicano?  Que sentido puede tener en la era posmoderna adoptar esa posición antagónica que en el contexto de la modernidad constituyo una alternativa radicalmente democrática? Desde que punto de vista puede hacerse una critica efectiva? En este transito de la modernidad a la posmodernidad.  Existe un lugar desde donde podemos lanzar nuestra critica y construir una alternativa o si estamos confinados al no lugar del imperio podemos construir un potente no lugar y llegar a concretarlo como el terreno propicio para crear un republicanismo posmoderno?